Sunday, August 18, 2024

Nicaragua: Tercer Sacerdote Detenido por el Régimen en Menos de Una Semana

Como ha venido ocuriendo, este tercer sacerdote también es de la diócesis de Matagalpa.

Información de Mosaico SCI, Ago-16-2024.

Policía detiene al padre Danny García de la Diócesis de Matagalpa

El operativo, que incluyó asedio en dos parroquias, fue ejecutado la noche de este jueves 15 de agosto en la continuidad de la represión contra la Iglesia católica

Por Mosaico CSI | 16 agosto, 2024


El padre Danny Roberto García Espinoza, párroco de la Parroquia San Juan Bautista en el municipio de Muy Muy, jurisdicción eclesiástica de la Diócesis de Matagalpa, fue detenido por la Policía la noche de este jueves 15 de agosto y su paradero es desconocido.

La detención del padre Danny, en la víspera de las Bodas de Oro Sacerdotales del cardenal Leopoldo José Brenes Solórzano —que las celebra este viernes 16 de agosto— se suma a una serie de detenciones y medidas represivas contra la Iglesia en la Diócesis de Matagalpa.

El domingo 11 de agosto fue detenido también el sacerdote Denis Martínez García, mientras que dos mujeres que colaboraban con la Iglesia fueron detenidas el sábado 10 de agosto.

Estas acciones son parte de una ofensiva más amplia del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, que ha intensificado los interrogatorios, las amenazas a laicos y las restricciones a las actividades eclesiales.

Desde el anochecer de este jueves 15 de agosto, la Policía mantuvo el asedio y rodeó la casa cural de la Parroquia San Juan Bautista en Muy Muy, pero también la casa cural de la Parroquia San Ramón Nonato en el municipio de San Ramón, que el padre Danny estaba atendiendo ocasionalmente tras la detención y destierro del párroco, monseñor Ulises René Vega Matamoros.

De acuerdo con la versión de algunos cercanos al caso, el padre Danny estaba en un lugar distinto a esas casas curales, de donde se lo llevaron con dirección imprecisa.

La represión no se limita a las ciudades. Según la abogada Martha Patricia Molina, en algunas comunidades rurales del norte de Nicaragua se ha prohibido a los delegados de la Iglesia celebrar la Palabra de Dios los domingos y jueves, así como visitar a los enfermos y llevarles la comunión. Aquellos que desobedecen estas órdenes enfrentan la posibilidad de ser acusados y encarcelados.

En la Diócesis de Matagalpa, los encuentros de movimientos eclesiales y laicales han sido suspendidos, y la presencia policial en las cercanías de los templos ha generado un clima de miedo entre los fieles.

La Diócesis de Matagalpa, que alguna vez contaba con un clero robusto, ha visto una reducción drástica en el número de sacerdotes activos debido a detenciones, exilios forzados y otras formas de presión.