Así sea solamente un rumor, llegue el que llegue la va a tener fácil, cualquier cosa será mejor que lo que existe actualmente. Ojo, porque aquí se habla de las comunicaciones del Vaticano, la camarilla esa de chupamedias que funcionaba como una no declarada oficina de de relaciones públicas de Francisco se entiende que se ha disuelto (aqui escribimos con el deseo). Ahora, el Opus Dei en la materia aludida tiene las suficientes heridas de guerra para exhibir. Y como solamente es un rumor, pues aquí lo que se dice siempre en estos casos: Veremos.
Artículo de Il Giornale, May-29-2025. Traducción de Secretum Meum Mihi.
Follow @SECRETUMMEUMRumores sobre el regreso del Opus Dei: qué está pasando en el Vaticano
El Papa León busca nuevas síntesis en nombramientos tras años de conflicto entre progresistas y conservadores
Francesco Boezi | 29 de mayo de 2025
El Papa León XIV a la toma de nombramientos en el Vaticano. El pontífice estadounidense no hará barrida, pero es posible que se aplique la rotación más clásica entre las altas esferas de la Santa Sede. Como ya se ha entendido en estas primeras semanas, no hay intención de romper con el sistema de nombramientos del anterior pontífice. Sin embargo, las figuras seleccionadas hasta ahora por el Papa Prevost pueden considerarse “moderadas”, especialmente en comparación con la línea progresista del Papa argentino.
En la Iglesia Católica, las posiciones y encargos nunca han sido rígidos. Si bien la tradición, incluso en este contexto, siempre ha tenido un peso.
Por eso, desde hace unas semanas, fuentes cercanas a los sagradas estancias del Vaticano relatan cómo el Opus Dei podría volver pronto a gestionar la Comunicación y, en específico, la Oficina de Prensa de la Santa Sede. Joaquín Navarro Valls, periodista y médico español, fue su director hasta 2006. Hombre, como es sabido, muy cercano al Papa Juan Pablo II, Navarro Valls era numerario de la prelatura personal fundada por Josemaría Escrivá.
Y Greg Burke, quien dirigió la Oficina de Prensa durante los primeros años del pontificado del papa Francisco, también formaba parte del Opus Dei. El padre Federico Lombardi, jesuita, quien dirigió la Oficina de Prensa después de Navarro Valls, no forma parte de la prelatura personal. Y el actual director, Matteo Bruni, tampoco forma parte del Opus Dei, pues es miembro de la Comunidad de San Egidio de Andrea Riccardi y el cardenal Matteo Maria Zuppi.
Durante el pontificado de Jorge Mario Bergoglio, las relaciones del Papa con el Opus Dei, según el análisis de más de un observador, nunca fueron idílicas. En particular, la carta apostólica Ad charisma tuendum, de agosto de 2023, fue interpretada por muchos como un intento del Papa de redimensionar la prelatura personal.
Algunos, debido a la reubicación de la prelatura del Dicasterio para el Clero, también han hablado de una verdadero comisariamiento. Movimientos que se han percibido como una especie de degradación canónica, por así decirlo, de una prelatura personal a una “asociación clerical pública de derecho pontificio”. Y esto es especialmente cierto desde el punto de vista de los conservadores.
Inmediatamente después de su elección al trono de Pedro, el Papa Prevost se reunió con Monseñor Fernando Ocariz, prelado del Opus Dei. Con la misma naturalidad con la que se definió como distante la relación entre Bergoglio y la prelatura personal, muchos interpretaron ese encuentro como el inicio de un acercamiento. En particular, se destacó el momento oportuno: Prevost se reunió inmediatamente con Ocariz, demostrando su deseo de promover la unidad que ha mencionado en más de una ocasión.
También por esta razón, una de las propuestas más comentadas se refiere a la posibilidad de que el Opus Dei regrese a ocuparse de la comunicación en el Vaticano. Sería un acto eclesial con gran poder simbólico.
Sin embargo, no se trata solo de la Oficina de Prensa. En el ámbito de la comunicación, el Dicasterio para la Comunicación también desempeña un papel central, confiado por el exarzobispo de Buenos Aires a un equipo de laicos. El Papa León XIV ya ha demostrado no tener nada en contra de los nombramientos laicos.
Pero crece la curiosidad sobre el futuro de funciones tan cruciales para la difusión del mensaje católico, especialmente en una era tan transformadora como la actual.
La tensión entre progresistas y conservadores que ha afectado casi toda la duración del pontificado de Francisco podría resolverse encontrando nuevas síntesis.