Tuesday, April 2, 2024

“Le dije unas palabras con cariño y lo bendije”, Francisco refiere cómo se despidió de Benedicto

Viniendo de Vatican News esperabamos un material más profuso respecto de lo que reseñan sobre el libro-entrevista con Francisco “El Sucesor”, de Javier Martínez-Brocal.

Este es el artículo de Vatican News, Abr-02-2024.

El libro con los recuerdos de Francisco sobre Benedicto XVI: "Para mí fue un padre”

“El Sucesor”, el libro entrevista del periodista Javier Martínez-Brocal al Papa: “Siempre me defendió, jamás interfirió”.

Vatican News


«Benedicto era un hombre de gran mansedumbre. En algunos casos, ciertas personas se aprovecharon, quizá sin mala intención, y limitaron sus movimientos. Lamentablemente, de alguna manera, lo fueron cercando. Era un hombre muy delicado, pero no débil, era fuerte. Pero ahí, consigo mismo, era humilde y prefería no imponerse. Así que sufrió bastante». Estas son algunas de las palabras con las que el Papa Francisco recuerda a su predecesor Benedicto XVI, en el libro entrevista con el periodista Javier Martínez-Brocal (“El Sucesor”, Editorial Planeta), que sale a la venta el miércoles 3 de abril.

«Me dejó crecer -explica Francisco-, me dio paciencia. Y, si no veía clara alguna cosa, pensaba tres o cuatro veces antes de decírmelo. Me dejó crecer y me dio libertad para tomar decisiones». El Papa relató la relación que durante casi diez años de convivencia en el Vaticano le unió al emérito: «Daba libertad, nunca se entrometió. Por ahí, en una ocasión en que hubo una decisión que no entendía, me preguntó al respecto con mucha naturalidad. Me dijo: “Mire, yo no entiendo esto, pero la decisión está en sus manos”, y yo le expliqué los motivos y quedó contento». Francisco explica en el libro que su predecesor nunca se opuso a ninguna de sus decisiones: «Él nunca me quitó el apoyo. Quizá hubo alguna cosa que hice con la que él no estaba de acuerdo, pero nunca lo dijo».

El Papa recordó también las circunstancias de su adiós a Benedicto el miércoles 28 de diciembre de 2022, cuando le vio con vida por última vez: «Benedicto estaba acostado en la cama. Seguía consciente, pero no conseguía hablar. Me miraba, me apretaba la mano, entendía lo que yo le decía, pero no lograba articular palabra. Estuve un rato con él así, lo miraba y le tomaba la mano. Recuerdo perfectamente sus ojos claros... Le dije unas palabras con cariño y lo bendije. De esta forma, nos despedimos».

En cuanto a la continuidad entre los pontificados, Francisco dijo: «Lo que veo en los últimos papas… es que el que siguió siempre marcó continuidad, continuidad y diferencia», porque «dentro de la continuidad, cada uno aportó su carisma personal… siempre hay continuidad, no ruptura».

Francisco también relató un caso concreto en el que fue defendido por Benedicto XVI. «Tuve una entrevista muy bella con él cuando unos cardenales fueron a verle extrañados por mis palabras sobre el matrimonio, y él fue clarísimo con ellos. Un día se presentaron en su casa para hacerme prácticamente un proceso y me acusaron ante él de que yo promovía el matrimonio homosexual. Benedicto no se agitó, porque sabía perfectamente lo que yo pienso. Los escuchó a todos, uno a uno. Los calmó y les explicó todo. Fue una vez que mencioné que, como el matrimonio es un sacramento, no puede administrarse a parejas homosexuales, pero que, de alguna manera, había que dar alguna garantía o una protección civil a la situación de estas parejas. Dije que en Francia existe la fórmula de las “uniones civiles”, que, a primera vista, puede ser una buena opción, pues no se limita al matrimonio. Por ejemplo —pensaba—, se pueden acoger a ella tres ancianas jubiladas que pueden compartir servicios de salud, herencia, vivienda, etcétera. Quisiera decir que me parecía una fórmula interesante. Algunos fueron a decirle a Benedicto que yo estaba diciendo herejías. Él los escuchó y, con mucha altura, los ayudo a distinguir las cosas… Les dijo: “Esto no es una herejía”. ¡Cómo me defendió!… Él siempre me defendió».

El Papa también respondió a la pregunta del periodista sobre los libros publicados en concomitancia con la muerte del Papa emérito. Francisco respondió: «Me afecta con una gran pena: que el día del sepelio se publique un libro que pone de vuelta y media, contando cosas que no son verdad, es muy triste. Por supuesto que no afecta en el sentido de que no me condiciona. Pero sí que me dolió que se usara a Benedicto. El libro salió publicado el día del entierro, eso lo viví como una falta de nobleza y de humanidad».

Finalmente, el Papa reveló a Javier Martínez-Brocal que ya había ordenado una revisión del funeral papal, explicando que el velatorio de Benedicto XVI fue el último con el cuerpo del Papa fuera del ataúd y del catafalco con almohadones. Los Papas «sean velados y sepultados como cualquier hijo de la Iglesia. Con dignidad, como cualquier cristiano»

Publicado “El Video del Papa” de Abril 2024

Publicado hoy el llamado “El Video del Papa” de Abril 2024. “Por el papel de las mujeres”, es el tema del presente video, según las intenciones anunciadas con antelación.

“Me dolió que se usara a Benedicto”: el papa Francisco reveló detalles de la convivencia entre dos papas y lanzó dardos contra su secretario

Artículo de La Nación, Abr-02-2024.

“Me dolió que se usara a Benedicto”: el papa Francisco reveló detalles de la convivencia entre dos papas y lanzó dardos contra su secretario

Elisabetta Piqué
2 de abril de 2024


ROMA.-
“Me dolió que se usara a Benedicto”, confiesa el papa Francisco en “El sucesor, mis recuerdos de Benedicto XVI” (Planeta), un nuevo libro que sale a la venta este miércoles en España y pronto en la Argentina. En diálogo con el periodista español Javier Martínez Brocal, por primera vez Jorge Bergoglio cuenta allí detalles de esa convivencia inédita que tuvo con su querido predecesor, Joseph Ratzinger y no oculta que tuvo una relación difícil con su secretario privado, el arzobispo alemán Georg Gänswein.

“Que el día del sepelio se publique un libro que me pone de vuelta y media, contando cosas que no son verdad, es muy triste. Por supuesto, no me afecta en el sentido de que no me condiciona. Pero sí me dolió que se usara a Benedicto. El libro salió publicado el día del entierro, eso lo viví como una falta de nobleza y de humanidad”, revela el Pontífice, aludiendo a “Nada más que la verdad. Mi vida al lado de Benedicto XVI”, libro de Gänswein que, en enero de 2023, días después de la muerte de Joseph Ratzinger, causó zozobra en la Iglesia al sacar a relucir supuestas tensiones entre los dos papas, el reinante y el emérito.

“El sucesor, mis recuerdos de Benedicto XVI”, libro de 238 páginas, es fruto de tres encuentros de unas cuatro horas, entre julio pasado y principios de este año, del Papa con Martínez-Brocal, corresponsal del diario ABC, en la residencia de Santa Marta. De 45 años y vaticanista desde hace más de 20 Martínez Brocal también incluyó algunos llamados telefónicos del Papa que le aclaraba ciertas cuestiones, según contó a LA NACION.

Es un documento clave: tira por la borda el falso mito de los dos papas enemigos o contrapuestos que algunos sectores contrarios al Pontífice argentino intentaron azuzar en los casi diez años de convivencia que tuvieron. Fue una cohabitación larga, desde el 13 de marzo de 2013 -cuando fue electo Jorge Bergoglio en un cónclave distinto porque no había muerto un papa, sino había renunciado, algo clamoroso, que no se daba en seis siglos años-, hasta el 31 de diciembre de 2022, cuando murió el papa emérito. Pero armoniosa.

“Al principio venía acá a comer conmigo. Venía acá o yo iba a comer con él al monasterio. Su cocinera hacía unos bifes argentinos bien jugosos; con demasiada pimienta, pero muy buenos”, revela el papa Francisco, que cuenta que también rezaban juntos y que hablaban de todo “con mucha libertad”. Como ya había hecho muchas veces durante su pontificado, no oculta su enorme admiración por su predecesor. Lo vuelve a llamar “un grande” y lo define como “un hombre que tuvo el coraje de renunciar y que, a partir de entonces, siguió acompañando a la Iglesia y a su sucesor”. “Nunca se entrometió (…) Nunca me quitó el apoyo (…) me dejó crecer y me dio libertad para tomar decisiones”, asegura.

Tras aclarar con ironía que los papas no están obligados a conservar el secreto y al responder preguntas del autor, Francisco confirma detalles que ya habían trascendido del cónclave de 2005 posterior a la muerte de Juan Pablo II, cuando el cardenal Bergoglio fue el segundo más votado. Entonces “intentaron usarme para que Ratzinger no fuera elegido”, denuncia, al revelar, por otro lado, que su candidato era Benedicto. También confirma esas intrigas que hubo durante el cónclave que lo eligió, cuando en el almuerzo del 13 de marzo de 2013, el día que fue electo, algunos fueron a preguntarle si era cierto que le faltaba un pulmón, versión falsa (sólo es un pequeño lóbulo que le quitaron en 1957) que hicieron correr sus opositores. Y confirma que no tuvo dudas de aceptar la carga de ser Papa.

Confirma que Benedicto “siempre me defendió”, que una vez hasta echó del monasterio Mater Ecclesiae -donde vivía, en los Jardines Vaticanos- a alguien que fue a hablar de él, pero admite que nunca se llevó bien con don Georg Gänswein: “su secretario me lo hizo algunas veces difícil”, reconoce.

Francisco convivió con Gänswein como prefecto de la Casa Pontificia hasta el escándalo que estalló en enero de 2020, cuando salió un libro a favor del celibato del cardenal africano Robert Sarah firmado supuestamente también por Benedicto. Era una operación pergeñada por el ala ultraconservadora que temía que tras el sínodo de la Amazonía Francisco pudiera darle vía libre a la ordenación sacerdotal de diáconos permanentes indígenas casados. Al darse cuenta de que ese libro podía interpretarse como una injerencia en el magisterio de su sucesor y visto que sólo había aportado un breve artículo, Benedicto pidió que retiraran su firma. “Me vi obligado a pedir al secretario de Benedicto que solicitara una ‘licencia voluntaria’, manteniendo el cargo de prefecto de la casa pontificia y también el sueldo”, evoca Francisco, que revela que cuando Gänswein el año pasado dejó el Vaticano para regresar sin función alguna a su Alemania natal se llevó “dos tráilers” de mudanza.

“No es buena cosa un secretario todopoderoso”, también afirma Bergoglio, que lamenta que alrededor del papa emérito “había una aduana muy grande”. En este marco explica por qué decidió “de entrada” disolver la Secretaría papal. Sólo tiene dos secretarios que no están a tiempo completo, sino que tienen otros trabajos y que suele cambiar cada cuatro o cinco años. “Ser secretario es muy difícil. Un buen secretario te ayuda y no deja huella”, sentencia.

Al evocar el funeral de su antecesor, como ya había trascendido Francisco confirma que dio disposiciones para ser enterrado en la Basílica de Santa María la Mayor y no en las Grutas de la Basílica del Vaticano -como la mayoría de los antecesores-. Y que modificó el ritual de los funerales pontificios para que sean más simples y menos recargados, “para que los papas sean velados y sepultados como cualquier hijo de la Iglesia”. “Con dignidad, como a cualquier cristiano, pero no sobre almohadones”, explica Francisco, al adelantar que sólo habrá un velatorio y con cajón cerrado. “Eso de hacer dos velatorios me parecía excesivo. Que se haga uno solo y con el papa ya en el ataúd, como en todas las familias”, dice.

Finalmente, el Papa niega que esté preparando nuevas normas para el cónclave y reitera que, si bien sigue siendo una renuncia una posibilidad, “por el momento no he sentido la necesidad”.

Papa Francisco dice que Benedicto le apoyó en los derechos para las parejas LGBT

Advertimos que el títular es de origen. Esta es una información de agencia Reuters, Abr-02-2024, también basado en contenidos del nuevo libro-entrevista con Francisco “El Sucesor”, de Javier Martínez-Brocal.

Papa Francisco dice que Benedicto le apoyó en los derechos para las parejas LGBT

Por Alvise Armellini

CIUDAD DEL VATICANO, 2 abr (Reuters) -
El Papa Francisco encontró un aliado en su predecesor Benedicto XVI cuando se pronunció a favor de las uniones civiles para parejas del mismo sexo, según afirma el pontífice en un nuevo libro que está a punto de ser publicado en España.

Está previsto que la obra salga a la venta el miércoles, pero su contenido fue compartido de forma anticipada el martes con varios medios, incluido Reuters.

Francisco confirmó la oposición de la Iglesia Católica a los matrimonios LGBT, pero ha dicho en repetidas ocasiones que las parejas del mismo sexo tienen derecho a ser protegidas por las leyes de uniones civiles.

Una mayor apertura hacia la comunidad LGBT ha sido uno de los sellos distintivos de su papado, que dura ya 11 años, pero el más conservador Benedicto no era conocido como simpatizante de la causa.

No obstante, Francisco dijo que Benedicto le defendió ante un grupo anónimo de cardenales que acudieron a él para quejarse de las "herejías" del Papa sobre las uniones civiles.

"Se presentaron en su casa para prácticamente llevarme a juicio y me acusaron delante de él de apoyar el matrimonio entre personas del mismo sexo", dijo Francisco.

Benedicto XVI les escuchó, "les ayudó a distinguir las cosas" y les dijo que lo que había dicho Francisco "no era ninguna herejía", dijo el religioso argentino.

Francisco hizo la revelación en el libro en español "Papa Francisco. El sucesor: Mis recuerdos de Benedicto XVI", basado en entrevistas con el periodista Javier Martínez-Brocal.

Ya en febrero de 2023, el papa había dicho que Benedicto desestimó una vez una queja sobre lo que dijo Francisco sobre las uniones civiles, pero ofreció menos detalles.

(Editado en español por Carlos Serrano)

Dignitas Infinita, documento del DDF sobre la dignidad humana se publicará el 8 de Abril

Así se celebrará La Anunciación en el Vaticano, movida este año a esa fecha porque caía luego del Domingo de Ramos.

Lo anunció hoy la Oficina de Prensa de la Santa Sede, de suerte tal que ya sabemos para qué fue esa audiencia de Mar-25-2024 (fecha en la que habitualmente se celebra La Anunciación). Este es un artículo de Aciprensa, Abr-02-2024.

Cardenal Víctor Fernández presentará el 8 de abril nuevo documento sobre la dignidad humana

Por Almudena Martínez-Bordiú
Apr 2, 2024


Dignitas Infinita” es el nombre del nuevo documento sobre la dignidad humana que el Vaticano publicará a inicios de la semana que viene.

La Oficina de Prensa de la Santa Sede informó esta mañana que el lunes 8 de abril, el Cardenal Víctor Fernández, prefecto del Dicasterio para la Fe, presentará además este nuevo documento a los periodistas en Roma.

En la rueda de prensa, que comenzará a las 12:00 p.m. (hora de Roma), participarán también Mons. Armando Matteo, secretario de la sección doctrinal del mismo dicasterio y Paola Scarcella, profesora de la Universidad Tor Vergata y de la Universidad Lumsa de Roma y responsable de la Catequesis a personas con discapacidad de la Comunidad de Sant'Egidio.

Según adelantó el Cardenal el pasado 7 de marzo al National Catholic Register, el documento ha tenido “varias versiones” pero “está ya casi terminado y la publicación será a principios de abril”.

Por su parte, el corresponsal del medio católico francés La Croix, Loup Besmond, señaló que los teólogos han estado trabajando en el documento durante los últimos cinco años, que el Cardenal Fernández lo ha “revisado completamente” y que el Papa lo ha instruido “específicamente que lo haga”.

Asimismo, el 12 de enero de este año el purpurado afirmó el documento contiene “una fuerte crítica a las tendencias inmorales de la sociedad contemporánea”.

El cardenal indicó a la agencia de noticias EFE que el nuevo documento “no incluye solamente los temas sociales, sino también una fuerte crítica a cuestiones morales como el cambio de sexo, el alquiler de vientres, las ideologías de género, etc”.

Además, señaló que no prevé más documentos controvertidos: “no creo que seré noticia en el futuro porque no tenemos previstos en el dicasterio temas que puedan ser muy polémicos, como los últimos”.

Las declaraciones del considerado “Ghost writer” (escritor fantasma) del Papa Francisco hacen referencia, entre otros, a Fiducia Supplicans, el documento publicado el 18 de diciembre de 2023 que permite a los sacerdotes católicos bendecir de forma “pastoral” y no ritualizada a las parejas en situación irregular y a las del mismo sexo.

Cabe destacar que en aquella ocasión el Vaticano no convocó ninguna rueda de prensa informativa sobre el polémico documento ni avisó previamente a los periodistas acreditados en la Oficina de Prensa de la Santa Sede.

Francisco acusa al secretario de Benedicto XVI de “falta de nobleza y de humanidad”

Artículo de La Vanguardia, Abr-02-2024.

LAS INTERIORIDADES DEL VATICANO
Francisco acusa al secretario de Benedicto XVI de “falta de nobleza y de humanidad”

• El Papa echa en cara a Georg Gänswein que usase la figura del emérito para aupar a sus opositores

ANNA BUJ
CIUDAD DEL VATICANO. CORRESPONSAL
02/04/2024


Después de castigarle enviándole de vuelta sin ningún cargo a su diócesis natal en Alemania, el papa Francisco ha decidido hablar claro y cargar sin tapujos contra el histórico secretario personal de Benedicto XVI, Georg Gänswein, a quien acusa de utilizar la figura del difunto papa emérito para aupar a los opositores a su pontificado. “Me dolió que se usara a Benedicto”, ha reconocido Francisco, asegurando que el monseñor alemán demostró una “falta de nobleza y de humanidad” al publicar un libro el día del entierro que criticaba al papa argentino.

“Que el día del sepelio se publique un libro que me pone de vuelta y media, que cuenta cosas que no son verdad, es muy triste. Por supuesto, no me afecta en el sentido de que no me condiciona. Pero sí que me dolió que se usara a Benedicto”, reconoce Francisco en una larga entrevista sobre su relación con Joseph Ratzinger que publica el periodista Javier Martínez-Brocal en el libro El sucesor.

Pasado más de un año desde la muerte del papa que renunció, Jorge Mario Bergoglio piensa que ya ha llegado la hora de hacer saber al mundo cómo vivió la coexistencia con su predecesor, que define como excelente. El Pontífice habla de Benedicto XVI como “un gran teólogo que dejó una gran herencia para la Iglesia con sus enseñanzas”, “un niño prodigio que iba por delante”, y que al dar un paso atrás demostró tomar una decisión “muy avanzada, progresista” para el futuro del gobierno del catolicismo. Sin embargo, cree que la figura del papa alemán fue utilizada por la minoritaria, pero ruidosa oposición ultraconservadora, a este papado. Algo que cree que nunca deseaba Benedicto, sino que fueron unos “loquitos” quienes pretendían darle al alemán un papel como garante del pontificado.

“Le digo con pena que su secretario me lo hizo algunas veces difícil”, remarca Francisco sobre Gänswein. Por ejemplo, cuando sustituyó a una persona al frente de un departamento, algo que generó polémica, el histórico colaborador de Benedicto quiso llevarlo ante el emérito y difundir una foto, como si este estuviese reprochando la decisión del Papa. “Honestamente, no fue correcto”, opina el Pontífice.

A su juicio, “muchos de los que lo apoyaban querían que él bajara más, que se pusiera más traumático, más contundente, más directivo, es decir, que dejara su papel de gran pastor y entrara en el juego de las polémicas”, pero él “nunca lo hizo”. El Papa asegura que su antecesor siempre lo defendió, y pone de ejemplo una vez que, después de que él señalara que las uniones civiles son una vía correcta para dar una protección legal a las personas homosexuales sin equiparar esto al matrimonio, una serie de cardenales acudieron a ver a Benedicto tachándole de hereje y de promotor del matrimonio homosexual. Según relata el Papa, Benedicto les escuchó uno a uno para después salir en su defensa y dejar claro que no estaba diciendo herejías. “La situación me ayudó a comprender que tenía acá personas que estaban medio tapaditas y que aprovechaban la menor ocasión para morderme”, avisa Francisco.

El Pontífice también alza la voz contra Gänswein al ser preguntado por el aislamiento percibido por la prensa durante el papado de Benedicto XVI. El Papa considera que su antecesor fue un hombre de “gran mansedumbre”, que en ocasiones prefería no imponerse a la voluntad de algunas personas que quisieron aprovecharse de la ocasión y limitar sus movimientos. Por ejemplo, Ratzinger solía acudir a cenar los domingos a casa de su antiguo secretario, Josef Clemens, con fama de cocinitas. De un día para otro, dejaron de celebrarse esas cenas. Un domingo, Benedicto llamó a Clemens y le dijo que ahora le podía llamar “porque salió don Georg”. “Es como si, para no ofender a sus colaboradores, evitara hasta hablar por teléfono”, reflexiona el jesuita.

Francisco critica también el papel del alemán en el entorno de Benedito XVI

Francisco conoció a Benedicto a finales de los años 90, cuando le nombraron arzobispo de Buenos Aires y Ratzinger era prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, el antiguo Santo Oficio. Acudía a verle cada vez que viajaba a Roma, le pidió ayuda en una cuestión de un nombramiento peliagudo y también hablaron de la lucha contra los abusos sexuales, algo en lo que estaban “totalmente en línea”. Después, deja claro que el alemán fue su candidato en el cónclave del 2005, tras la muerte de Juan Pablo II, contra las maniobras de algunos cardenales para evitar que saliera elegido Ratzinger, el gran favorito después de haber acompañado a Juan Pablo II durante años. Entonces Francisco llegó a tener 40 de los 115 votos en la Capilla Sixtina, suficientes para frenar su candidatura, pero asegura que los que habían escrito su nombre en la papeleta no deseaban que fuera papa, sino solamente bloquear la elección de un extranjero, Ratzinger, y escoger a una tercera persona. Cuando se dio cuenta, avisó al cardenal colombiano Darío Castrillón que debían parar porque no iba aceptar, y fue entonces cuando Ratzinger logró la mayoría suficiente para convertirse en el líder del catolicismo. “Era el único que en ese momento podría ser papa. Después de la revolución de Juan Pablo II, que había sido un pontífice dinámico, muy activo, con iniciativa, que viajaba… hacía falta un papa que mantuviera un sano equilibrio, un papa de transición –razona Francisco–. “Si hubieran elegido a uno como yo, que hace mucho lío, no habría podido hacer nada”.

El funeral de los Papas cambiará y Francisco dice que Benedicto nunca permitió que se hablara mal de él

Siguen apareciendo piezas sobre el nuevo libro-entrevista con Francisco “El Sucesor”, de Javier Martínez-Brocal. Consignamos dos de hoy de agencia EFE, más bien basadas en una entrevista que concedió el autor a esa agencia.

Primera nota en orden cronológico.

Francisco revela que ha cambiado el funeral de los papas y el cuerpo no será expuesto

Ciudad del Vaticano, 2 abr (EFE).-
El papa Francisco ha simplificado el ritual del funeral de los papas y su cuerpo no será expuesto en público, según revela en el libro 'El Sucesor", donde aborda por primera vez su relación con Benedicto XVI y confirma que será enterrado en la basílica de Santa María La Mayor y no en las grutas vaticanas.

En este libro-entrevista escrito por el periodista español Javier Martínez-Brocal, Francisco asegura que el funeral de Benedicto XVI fue el último que se llevó a cabo con el actual protocolo fúnebre y que en el caso del papa emérito todo lo decidió su secretario histórico, el alemán Georg Gänswein.

"Le confío una cosa, va a ser el último velatorio hecho así, con el cadáver del papa expuesto fuera del ataúd, en un catafalco. He hablado con el maestro de ceremonias y hemos eliminado eso y muchas otras cosas", asegura.

"Será con dignidad, como cualquier cristiano, pero no sobre almohadones. En mi opinión, el ritual actual estaba demasiado recargado. Eso de hacer dos velatorios me parecía excesivo. Que se haga uno solo y con el papa ya en el ataúd, como en todas las familias. Cambié varias cosas, en línea con la reforma que ya hicieron Pablo VI y Juan Pablo II", explica en el libro.

Durante los días del velatorio de Benedicto en San Pedro, la basílica cerraba sus puertas en torno a las siete de la tarde y no volvían a abrirse hasta las siete y media de la mañana.

Sin embargo, se organizó la entrada por una puerta lateral para que personas cercanas e invitados de los habitantes del monasterio Mater Ecclesiae, donde vivía el papa emérito, pudieran rezar allí también a lo largo de la noche.

"Ya no se hará una ceremonia para el cierre del ataúd. Se hará todo en la misma ceremonia, como con cualquier cristiano. Además, en mi caso me van a tener que llevar a la basílica de Santa María la Mayor. Cuando termine el funeral, que me lleven allá", confirmó el papa.

Y explica: "Tengo mucha devoción a Santa María la Mayor, ya desde antes de ser papa, desde siempre. Allí ya está todo preparado. Justo después de la escultura de la Reina de la Paz hay un pequeño recinto, una puerta que da a un cuarto que usaban para guardar los candelabros".

"Lo vi y pensé: Ese es el lugar, y ya está preparado ahí el lugar de la sepultura. Me han confirmado que ya está listo", añade.

Segunda nota.

El papa revela en un libro su relación con Ratzinger: No permitió que se hablase mal de mí

Cristina Cabrejas

Ciudad del Vaticano, 2 abr (EFE).-
El papa Francisco cuenta por primera vez cómo fueron los 10 años de convivencia con Benedicto XVI - en los que las diferentes facciones contrapusieron a los dos pontífices - en un libro en el que en el que asegura que siempre le defendió y nunca permitió que se hablase mal de él.

"Daba libertad, nunca se entrometió. Por ahí, en una ocasión en que hubo una decisión que no entendía, me preguntó al respecto con mucha naturalidad. Me dijo: 'Mire, yo no entiendo esto, pero la decisión está en sus manos', y yo le expliqué los motivos y quedó contento", explica en el libro 'El Sucesor', del periodista español Javier Martínez-Brocal.

Francisco asegura que Ratzinger nunca le retiró su apoyo. "No permitió que se hablara mal de mí", dice y cuenta que el papa alemán "siempre le defendió", incluso cuando algunos eclesiásticos fueron al monasterio donde vivía para "hablar mal" de él y decir que el pontífice argentino apoyaba los matrimonios homosexuales y decía "herejías".

"Era necesario que el papa Francisco diera su versión sobre lo que han pasado en estos 10 años de convivencia entre los dos papas. Nadie se lo había preguntado con detenimiento y la verdad es que me sorprendió la libertad con la que contó los episodios más difíciles y también cómo él vivió los problemas", explica a EFE el autor.

Y en el volumen, que saldrá mañana a la venta, "lo que queda claro es que ni Benedicto consideraba a Francisco un rival, ni Francisco consideraba Benedicto XVI un enemigo. Entre los dos había enorme lealtad, enorme admiración, pero sí que salen a la luz las tensiones entre los dos equipos que apoyaban a cada pontífice, pero entre ellos dos había unidad de intenciones y total simpatía", agrega el periodista.

Sobre el libro del histórico secretario de Ratzinger, Georg Gänswein, 'Nient'altro che la Verità' (Nada más que la verdad), Francisco rompe le silencio.

"Me afecta con una gran pena: que el día del sepelio se publique un libro que me pone de vuelta y media, contando cosas que no son verdad, es muy triste. Por supuesto, no me afecta en el sentido de que no me condiciona. Pero sí que me dolió que se usara a Benedicto. El libro salió publicado el día del entierro, eso lo viví como una falta de nobleza y de humanidad", responde Francisco.

Las maniobras del cónclave de 2005

Pero en el libro además de contar los diez años de convivencia, también el papa reconstruye el cónclave de 2005 revelando que hubo algunas estratagemas entre los cardenales usando al entonces cardenal Bergoglio.

"Sucedió que yo llegué a tener 40 de los 115 votos en la Capilla Sixtina. Eran suficientes para frenar la candidatura del cardenal Joseph Ratzinger, porque, si me hubieran seguido votando, él no habría podido alcanzar los dos tercios necesarios para ser elegido papa", describe Francisco.

Y continúa: "La maniobra consistía en poner mi nombre, bloquear la elección de Ratzinger y después negociar un tercer candidato. Me contaron, más tarde, que no querían a un papa 'extranjero'. Fue una maniobra en toda regla. La idea era bloquear la elección del cardenal Joseph Ratzinger. Me usaban a mí, pero detrás ya estaban pensando en proponer a otro cardenal".

Pero entonces, cuenta Bergoglio: "Le dije a un cardenal latinoamericano, el colombiano Darío Castrillón: 'No embromen con mi candidatura, porque ahora mismo voy a decir que no voy a aceptar, ¿eh? Dejame ahí'. Y ahí ya salió elegido Benedicto".

"Sí, con mucha, con mucha tranquilidad. El papa Francisco habló de cómo va a ser su funeral. Se trata, sobre todo de reducir oropeles, de que el Vaticano no se parezca a una corte barroca, a una corte renacentista, sino que sea lo más parecido posible a lo que vivió San Pedro", explica el periodista.

"Le confío una cosa, va a ser el último velatorio hecho así (el de Benedicto XVI), con el cadáver del papa expuesto fuera del ataúd, en un catafalco. He hablado con el maestro de ceremonias y hemos eliminado eso y muchas otras cosas", adelantó Francisco

Será "con dignidad, como a cualquier cristiano, pero no sobre almohadones. En mi opinión, el ritual actual estaba demasiado recargado. Eso de hacer dos velatorios me parecía excesivo. Que se haga uno solo y con el papa ya en el ataúd, como en todas las familias", explica el que papa que confirma que será enterrado en Santa María La Mayor, una de las basílicas de Roma, y no en las grutas vaticanas.