Monday, May 13, 2024

No existe una interpretación oficial de la Iglesia sobre las visiones de Fátima


Esto lo hemos referido varias veces (obviamente en el blog que nos cerraron) porque no faltan consuetudinariamente los que echan en cara que el “intento de interpretación” (sic) hecho por el cardenal Joseph Ratzinger de la visión dada a conocer en Jun-26-2000 por parte del Vaticano, cuando presumiblemente se iba a dar a conocer el tercer secreto de Fátima (se le dice así popularmente, aunque no es del todo exacto), bajo la designación “El Mensaje de Fátima”, dizque es la interpretación oficial de la Iglesia. Y lo que repetimos siempre es: No.

En esta ocasión aprovechamos para traer un video de la conferencia de prensa en la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Jun-26-2000, en la cual se presentó “El Mensaje de Fátima”, allí se escucha decir al entonces prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, el cardenal Joseph Ratzinger, es decir, el autor de aquel “intento de interpretación” (sic), ante una pregunta del periodista de La Repubblica, Marco Politi, que “no existe una interpretación oficial de la Iglesia de estas visiones” (desde 02:40). Y después, “no es intención de la Iglesia imponer una interpretación” (desde 03:55).

Así que las palabras aquellas del entonces Secretario de Estado, cardenal Angelo Sodano, de May-13-2000, en las cuales anticipaba una interpretación, forzada por demás, de que el designado tercer secreto de Fátima era el atentado de May-13-1981 a Juan Pablo II en la Plaza de San Pedro, son plenamente discrepables, prescindibles. Eso es lo que nosotros, con la libertad que brinda la Iglesia, hacemos, discrepar y prescindir.

Nuestra Señora de Fátima, ruega por nosotros.

El Vaticano organiza una conferencia sin precedentes sobre sus relaciones con China

Artículo firmado por el corresponsal en el Vaticano de La Croix, Loup Besmond de Senneville, May-13-2024. Traducción de Secretum Meum Mihi.

El Vaticano organiza una conferencia sin precedentes sobre sus relaciones con China

El 21 de mayo próximo, la Santa Sede organiza una conferencia internacional en la que participarán el obispo de Shanghai, que acude con la aprobación de Beijing, así como el presidente de un instituto chino muy activo en el movimiento de sinización de las religiones. Una novedad en un contexto de distensión entre China y el Vaticano.

Loup Besmond de Senneville (en Roma), 13/05/2024


Habitualmente el Vaticano no habla de eso. La relación con Beijing es uno de esos temas sobre los cuales conviene permanecer discreto dentro de los muros de la Ciudad leonina. Sin embargo, la Secretaría de Estado decidió organizar, el martes 21 de mayo, una conferencia de alto nivel sobre las relaciones entre Roma y Beijing. El programa fue puesto en línea discretamente el viernes 10 de mayo, pero el Vaticano aún no ha hecho ninguna publicidad al respecto.

Más allá de la temática de fondo —“100 años del Consejo Plenario de China: entre historia y presente”— esta conferencia suena como una señal política mayor, ya que varios altos responsables chinos harán desplazamiento para participar. Por parte de la Iglesia, este será en primer lugar el caso del obispo de Shanghái, Monseñor Joseph Shen Bin. Un desplazamiento que no puede realizarse sin la aprobación de Beijing.

El obispo Shen Bin había sido objeto de tensiones particulares entre el Vaticano y China, puesto que las autoridades chinas decidieron unilateralmente, en abril de 2023, su nombramiento en la capital económica china. Esta noticia fue interpretada por algunos como una violación del acuerdo alcanzado con la Santa Sede en 2018, según el cual las dos partes deben ponerse de acuerdo antes de nombrar a cualquier obispo en China. Pero, como señal de apaciguamiento, Mons. Shen Bin ahora es considerado también por Roma obispo de Shanghái.

El régimen chino representado

Por parte del gobierno, el programa de esta conferencia, que tendrá lugar en la Pontificia Universidad Urbaniana, prevé la presencia de una personalidad clave del régimen chino para la organización de las religiones en el país. Se trata, en efecto, de la investigadora Zheng Xiaojun, presentada como directora del Instituto de Religiones del Mundo de la Academia China de Ciencias Sociales. Pero esta quincuagenaria es también la presidenta de la Sociedad Religiosa China.

Estas dos organizaciones desempeñan un papel de primer orden en el movimiento de «sinización» de las religiones, que consiste en dar un color nacional a todas las religiones presentes en el país. El movimiento fue lanzado en la década de 1950 por el régimen de Mao, que creó asociaciones religiosas oficiales, rompiendo en la ocasión todos los vínculos con el Vaticano. Una dinámica querida por el actual presidente Xi Jinping, que continúa reforzandola.

La Academia China de Ciencias Sociales, a nombre de la cual Zheng Xiaojun, se hace presente en Roma, ejerce altas responsabilidades, fue creada en 1964 para supervisar los estudios académicos realizados sobre las religiones en China. El instituto se presenta como una plataforma destinada a trabajar sobre las «perspectivas religiosas marxistas». Incluye, en particular, un «laboratorio de investigación sobre las opiniones religiosas marxistas».

«La participación en Roma de una personalidad china de este nivel en un evento público organizado por el Vaticano es inédita», comenta, del lado católico, un buen conocedor de la cuestión china. La señal es tanto más fuerte cuanto que esta conferencia tendrá lugar en el seno de una universidad pontificia, es decir, en territorio del vaticano. «Lo cual está lejos de ser un detalle», comenta la misma fuente.

Política de apaciguamiento

En el curso esta conferencia, la Santa Sede tiene previsto difundir un mensaje en vídeo del propio Papa. Francisco rara vez habla sobre China, incluso si el tema es particularmente cercano a su corazón. La última vez que habló sobre el tema se remonta a septiembre de 2023, durante su viaje a Ulán Bator, la capital de Mongolia. Entonces instó a los católicos chinos a ser «buenos ciudadanos». Algunos interpretaron estas palabras como un deseo de mostrar a Beijing que Roma no buscaba interferir en los asuntos internos chinos.

Otros discursos a alto nivel seguirán el martes 21 de mayo. Así, el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado de la Santa Sede, cerrará los trabajos de la mañana, mientras que al final de la jornada hablará el cardenal Luis Antonio Tagle. Los dos hombres son oficialmente responsables de la espinosa cuestión china, que en teoría gestionan la Secretaría de Estado y el dicasterio para la evangelización (del que el cardenal Tagle es prefecto). Es este dicasterio, heredero de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, el que supervisa toda la organización de la Iglesia católica en el gran sur del mundo, incluida China.

De acuerdo con informaciones a La Croix, esta conferencia también podría dar lugar, en los próximos días, a un «anuncio importante» en el ámbito de las relaciones entre China y el Vaticano. En Roma se habla de la posible creación de una oficina de enlace entre Beijijg y la Santa Sede. Esta noticia, de confirmarse, constituiría un acontecimiento muy importante en las relaciones entre China y los altos dirigentes de la Iglesia católica.

Empleados De Los Museos Vaticanos Emprenden Acciones Legales Por Sus Condiciones Laborales

La información original la obtuvo Corriere Della Sera, May-12-2024; este es un despacho en español de agencia AFP, May-12-2024.

Casi cincuenta empleados de los Museos Vaticanos emprendieron acciones legales para impugnar sus condiciones de trabajo y la falta de seguridad para el personal y los visitantes, indicó el domingo su abogada.

Cuarenta y nueve trabajadores, 47 de ellos guardias, enviaron una notificación formal al cardenal Fernando Vérgez Alzaga, presidente de la Gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano, que ejerce el poder ejecutivo de la Santa Sede bajo la autoridad del papa.

"Las condiciones de trabajo atentan contra la dignidad y la salud de todos los empleados. La mala gestión es evidente, y sería aún más grave si se debiera al único propósito de generar más beneficios", escribieron, según la información revelada por el diario Il Corriere della Sera y confirmada a la AFP por su abogada, Laura Sgro.

Los demandantes afirman ser víctimas de normas demasiado restrictivas o de infracciones de la legislación laboral y de seguridad social.

Señalan, por ejemplo, que cuando están de baja por enfermedad no se les permite salir de casa por ningún motivo ya que los inspectores de asuntos sociales pueden visitarles en cualquier momento. Algunos afirman haber sido sancionados mientras estaban en el médico.

Entre otras cosas denuncian que "en el Vaticano no hay seguro de desempleo, ni medidas de apoyo financiero en caso de crisis o pérdida total de actividad". También reprochan que se acepten más visitantes de los establecidos por las normas de seguridad.

Los Museos Vaticanos, donde se encuentra la Capilla Sixtina, emplean a unas 700 personas y reciben a millones de visitantes cada año y son una valiosa fuente de ingresos para la Santa Sede.

Una información un tanto más detallada en este despacho de agencia AP, May-13-2024.

ROMA (AP) — Cuarenta y nueve empleados de los Museos Vaticanos presentaron una demanda colectiva ante el gobierno del Vaticano para reclamar mejores condiciones de antigüedad, bajas por enfermedad y compensaciones de horas extra, en un inusual desafío público a la gobernanza del papa Francisco.

La demanda, con fecha del 23 de abril y hecha pública este fin de semana en periódicos italianos, también alega que el personal corre riesgos de salud y seguridad debido a medidas de reducción de costes y que parecen generar beneficios en los museos, como las aglomeraciones y la reducción de guardas de seguridad para mantener a los turistas a raya.

Ni el portavoz del Vaticano ni el cardenal Fernando Vérgez Alzaga, presidente del gobierno estatal del Vaticano y responsable de los museos, respondieron a un email que solicitaba comentarios.

La demanda era un nuevo desafío legal que subraya cómo las leyes, regulaciones y prácticas del Vaticano son con frecuencia incompatibles con las normas europeas y europeas. En los últimos meses, casos penales y civiles han dejado sobre la mesa cómo los trabajadores del Vaticano, especialmente ciudadanos italianos legos, tienen pocos o ningún recurso más allá del peculiar sistema judicial de la ciudad estado, una monarquía absoluta en el que Francisco ostenta la máxima autoridad ejecutiva, legislativa y judicial.

En la demanda colectiva, escrita y firmada por la veterana abogada vaticana Laura Sgro en nombre de los 49 trabajadores, empleados de museo citaron las enseñanzas sociales de la Iglesia católica y las propias peticiones de Francisco a que los empleadores respeten la dignidad de los trabajadores que reclaman un trato mejor.

Entre otras cosas, los denunciantes reclamaron más transparencia sobre cómo pueden ascender los empleados y que se restablezcan las primas por veteranía, además de insistir en que el Vaticano cumpla las normas italianas sobre ausencias por enfermedad. En este momento los empleados deben quedarse en casa todo el día, en lugar de unas pocas horas, para esperar una posible visita de comprobación de que no están simplemente tomándose un día libre, señaló la demanda.

Según las normas laborales del Vaticano, Verzaga tiene 30 días para responder a la demanda. Si no se inician conversaciones, Sgro puede llevar las quejas a la oficina laboral del Vaticano para intentar una reconciliación negociada, lo que podría terminar en la corte. Sin embargo, la oficina puede negarse a tramitar el caso, algo que según los abogados hace con frecuencia, lo que deja a los empleados sin más recursos.

En casos recientes presentados ante el tribunal vaticano, los abogados han indicado que podrían intentar llevar las demandas de los empleados sobre el sistema ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. La Santa Sede no es miembro del tribunal ni ha firmado la Convención Europea de Derechos Humanos. Pero algunos abogados dicen que sin embargo, el Vaticano se comprometió a respetar las normas europeas de derechos humanos cuando se sumó a la convención monetaria de la Unión Europea en 2009.

Los Museos Vaticanos son una de las principales fuentes de ingresos del Vaticano, dependientes de la burocracia de la Santa Sede, que actúa como gobierno central de la Iglesia católica. Los museos, que sufrieron un duro golpe financiero por los cierres y restricciones asociados al COVID-19, subieron a principios de año el coste de la entrada completa a 20 euros (21,50 dólares), respecto a los 17 euros previos.

Nuestra Señora de Fátima, ruega por nosotros

Nuestra Señora de Fátima, ruega por nosotros