104 oenegés, incluyendo Cáritas Internationalis, denunciaron que Israel impide el ingreso de ayuda humanitaria a Gaza, mientras la hambruna avanza. Israel ha respondido rechazando las “falsas acusaciones” (sic), argumentando que estas oenegés no colaboran con los requisitos de seguridad al no proporcionar información detallada sobre cada uno de sus colaboradores, cuya casi totalidad son palestinos.
Sobre la inicial denuncia de las oenegés, información de agencia EFE, Ago-14-2025.
Madrid, 14 ago (EFE).- Más de un centenar de organizaciones internacionales denunciaron este jueves que Israel no permitió a ninguna de ellas entregar ni un solo camión de suministros esenciales en la Franja de Gaza desde que comenzara el asedio al enclave el 2 de marzo y ahora amenza con prohibir a las organizaciones humanitarias más importantes.
En un comunicado suscrito por Caritas, Médicos del Mundo, Oxfam o Médicos Sin Fronteras (MSF), entre otras, las penegés denuncian que es falso los anuncios del gobierno israelí de que no pone límites a la ayuda que entra en Gaza, centralizada principalmente en la organización de exmilitares estadounidenses Fundación Humanitaria para Gaza (GHF).
«Las autoridades israelíes han rechazado las solicitudes de decenas de ONG para introducir en Gaza suministros vitales, alegando que estas organizaciones ‘no están autorizadas a entregar ayuda’. Solo en julio, se denegaron más de 60 solicitudes bajo esta justificación», subrayan en el escrito.
Muchas de estas organizaciones ahora vetadas por Israel llevan décadas repartiendo ayuda en la Franja: «su exclusión ha dejado a los hospitales sin suministros básicos, a los niños, a las personas con discapacidad y a los ancianos muriendo de hambre y enfermedades prevenibles, y a los propios trabajadores humanitarios yendo a trabajar con hambre», lamentaron las organizaciones.
Nuevos criterios «politizados»
Israel ha impuesto nuevos criterios para la entrada de ayuda que son «vagos y politizados», que incluyen tener que presentar obligatoriamente detalles sobre los donantes privados de la ayuda o listas completas del personal palestino con información sensible.
«Las ONG han dejado claro que compartir tales datos es ilegal, inseguro e incompatible con los principios humanitarios», apuntan las organizaciones, que recuerdan que el 98 % de los humanitarios asesinados en el mundo son palestinos, por lo que exponerlos les pondrá en mayor riesgo.
Con estos criterios «muchas organizaciones podrían verse obligadas a detener sus operaciones en Gaza y Cisjordania, incluido Jerusalén Este, y retirar a todo el personal internacional en un plazo de 60 días. A algunas organizaciones incluso se les ha dado un ultimátum de siete días para proporcionar las listas del personal palestino», denunciaron las organizaciones.
Millones de dólares en comida varada
Hay -según dicen- «millones de dólares en alimentos, medicinas, agua» y otros artículos varados en almacenes en Jordania y Egipto, «mientras los palestinos se mueren de hambre».
El director ejecutivo de Anera, una de las organizaciones firmantes, Sean Carroll, explicó que esta oenegé tiene «más de 7 millones de dólares en suministros vitales bloqueados para entrar en Gaza, incluyendo 744 palets de arroz, suficientes para seis millones de comidas, bloqueados en Ashdod a solo kilómetros de distancia».
Oxfam tiene «más de 2,5 millones de dólares en bienes que han sido rechazados para entrar en Gaza por Israel, especialmente artículos de higiene y saneamiento, así como alimentos», según Bushra Khalidi, su responsable de políticas.
Y CARE no ha podido entregar ninguno de los suministros preposicionados, valorados en 1,5 millones de dólares, que incluyen «paquetes de alimentos, suministros médicos, kits de higiene, kits de dignidad y artículos de cuidado materno infantil».
Para las organizaciones, las restricciones impuestas por Israel forman parte «de una estrategia más amplia que incluye el llamado programa GHF, un mecanismo de distribución militarizado que se promociona como una solución humanitaria» y en cuyo repartos han sido asesinadas al menos 859 personas.
Por ello, las organizaciones piden presionar a Israel para que ponga fin «al uso de ayuda como arma» y levante las obstrucciones burocráticas y los criterios impuestos, así como «la apertura inmediata e incondicional de todos los cruces fronterizos y las condiciones para la entrega de ayuda humanitaria vital».
Sobre la respuesta de Israel, información de agencia EFE, Ago-14-2025.
Follow @SECRETUMMEUMJerusalén, 14 ago (EFE).- El Ejército israelí acusó este jueves a las ONG que no han podido introducir ayuda humanitaria en la Franja de Gaza de no cumplir con los «requisitos de seguridad básicos» de darles información sobre sus trabajadores para, según dice Israel, evitar que el grupo islamista Hamás, que controla el enclave, se beneficie del reparto.
El organismo militar encargado de supervisar el reparto de ayuda en el asediado enclave, el COGAT, respondió así a un comunicado firmado por más de cien ONG, entre ellas Cáritas, Oxfam o Médicos Sin Fronteras (MSF), en el que denuncian que Israel no les ha permitido entregar ni un solo camión con suministros desde marzo.
«El supuesto retraso en la entrada de ayuda, según las organizaciones que firmaron el comunicado, solo ocurre cuando las organizaciones deciden no cumplir con los requisitos básicos de seguridad diseñados para evitar que Hamás se involucre», aseguró el COGAT en redes sociales.
Esos «requisitos» se refieren a la nueva normativa aprobada a principios de marzo por las autoridades israelíes para obligar a los organismos internacionales a registrar información sensible sobre sus trabajadores palestinos.
En su mensaje, las ONG denunciaron que ese registro puede poner en peligro a sus empleados, y recordaron que el 98 % de los trabajadores humanitarios asesinados en todo el mundo son palestinos.
Según el COGAT, sin embargo, el proceso de registro se basa en «criterios profesionales y de seguridad claros» diseñados para impedir «la infiltración de elementos terroristas», en referencia a miembros de Hamás. Israel acusa sin pruebas a este grupo islamista de quedarse con la ayuda humanitaria que entra en Gaza.
«La negativa de algunas organizaciones internacionales a proporcionar la información y cooperar con el proceso de registro genera serias dudas sobre sus verdaderas intenciones», dijo el organismo militar israelí.
Desde que comenzó la ofensiva israelí contra Gaza, tras los ataques de Hamás del 7 de octubre de 2023, al menos 508 trabajadores humanitarios han sido asesinados en el enclave, de los que 346 trabajaban para la ONU, 51 para la Media Luna Roja Palestina, cuatro para el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y 107 para otras organizaciones, según el recuento de la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) de Naciones Unidas.
En su comunicado de este jueves, las ONG aseguraron que las autoridades israelíes sí ponen límites a la entrada de ayuda a la Franja, en contra de lo que asegura Israel, y que hay millones de dólares en alimentos, medicinas y agua varados en almacenes de Jordania y Egipto «mientras los palestinos se mueren de hambre».
El COGAT, por su parte, dijo este jueves que a lo largo del miércoles entraron a Gaza 380 camiones con ayuda humanitaria, otros 400 fueron recogidos y repartidos en el enclave por la ONU y otros organismos, y 119 palés con alimentos fueron lanzados desde el aire por seis países.
Según las organizaciones humanitarias, deberían entrar un mínimo de 500 camiones diarios (con unas 25 toneladas cada uno) en la Franja. De acuerdo a datos oficiales israelíes, en junio entraban entre 50 y 100 diarios. Desde que a finales de julio anunció las pausas humanitarias comenzaron a entrar 200 al día y ahora las cifras están en unos 300 diarios, unos números que el Gobierno de Gaza reduce a menos de 100.